El COVID-19 impactó el comercio exterior, por lo que se prevé que en 2020 las exportaciones cayeron 13% tanto en la región como en México, según estimaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

La secretaria ejecutiva del organismo, Alicia Bárcena, dijo que el intercambio comercial en la región dejó de ser el motor de crecimiento de las naciones de la zona durante el año pasado a consecuencia de la pandemia. 

Durante la presentación de las perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe 2020, la funcionaria dijo que se estima que en la región las exportaciones y las importaciones tuvieron descalabros de 18% y 20%, respectivamente. 

En el caso de México, la Cepal calculó que en 2020 la exportación cayó 13%, mientras que la importación se redujo 18%; en Brasil, los retrocesos fueron de 7% y 26%, respectivamente. 

Mientras que a escala regional y global se registraron caídas generalizadas, destaca el caso de China, la única economía con datos positivos para exportaciones e importaciones, y con crecimientos de 1% y 3% estimados para el año pasado.

La Cepal encontró que “a nivel regional se desploma el comercio y se acentúa la desintegración comercial y productiva”, pues hay una fuerte reducción del valor de importaciones y exportaciones de bienes, pero sobre todo un descalabro en materia de servicios de pasajeros y turismo. En contraste, se reporta un auge en servicios digitales.

En cuanto a los resultados al primer semestre del año pasado, la comisión dijo que el comercio de los países de la región tuvo una contracción de 19%, y solo las exportaciones de productos agrícolas y agropecuarios lograron crecer en ese lapso. 

Pero tras caer sincronizadamente, las exportaciones de bienes se recuperaron a partir de junio de forma más rápida que las importaciones, pero a la fecha se observa una caída del comercio intrarregional en Latinoamérica y el Caribe. 

“El COVID-19 magnifica la debilidad y la caída del comercio de bienes, excepto alimentos y medicamentos”, destacó Bárcena. 

Además, expuso que todos los países participan menos en el comercio global, porque hay sustitución de importaciones en Asia, Estados Unidos y Europa, lo que reduce las oportunidades, sobre todo para los países en desarrollo. 

El problema es que el futuro internacional es incierto y más proteccionista, dijo, por lo que la región tiene que superar la mirada bilateral y diversificarse más allá de un modelo primario exportador, para fortalecer el comercio intrarregional.

Fuente: El Financiero CR