Sin duda, el análisis de la situación logística de la fruta fresca, fue una de las secciones más esperadas por lo asistentes a la última edición de Global Cherry Summit, realizada el 19 de abril, ya que en ella, todos los actores involucrados en la cadena logística de exportación de cerezas, podrían obtener alguna explicación racional acerca de todos los problemas que vivieron en la última temporada, salpicada por la poca disponibilidad de sitios de atraques, de naves, de contenedores,, retrasos en puntos de destino y de arribo y de impresionantes alzas en los fletes por un servicio que, consideran, decayó estrepitosamente en cuanto a calidad.

En la primera parte del bloque Philip Gray, analista de Drewry, entregó una completa reseña de la evolución y actual panorama del transporte marítimo de contenedores. Entre los datos importantes que aportó en su exposición, indicó que los contenedores reefer controlan el 88% de la participación del mercado de carga refrigerada- mientras que un 12% lo componen las naves especializadas- y que hacia 2025, alcanzará más del 91% del mercado. Además, apuntó que se prevé que hacia 2025 se dé un crecimiento de volumen de movilización de contenedores reefer de un 4,4% (CAGR).

Destacó que previo a la crisis de 2008, las 10 mayores líneas navieras controlaban el 60% del mercado reefer. Sin embargo, en la actualidad sólo las Top 5 controlan el 66% y que al considerar las Top 10, la cifra de control alcanza el 86%.

Detalló además que la congestión portuaria de puertos claves y secundarios ha absorbido la disponibilidad de contenedores refrigerados (ocasionando un grave desequilibrio de equipo), conformando una de las causas del aumento de los fletes reefer, cuyo índice en el primer trimestre de 2022 se elevó un 50% sobre el mismo periodo de 2021 y un doble más alto que el mismo periodo de 2020.

Por supuesto, también destacó como a pesar del aumento de los costos, las líneas navieras, gracias al fortalecimiento de los fletes y la persistencia de la congestión en la cadena de suministro han obtenidos beneficios por más de 200.000 millones (el doble lo que han ganado en 20 años).

Sector frutícola «afligido»

En el panel, que fue moderado por el propio Gray, correspondió a Alejandro García Huidobro, Gerente General de Exportadora Prize, dar cuenta de las inquietudes de los exportadores de Cerezas. Al reconocer los problemas logísticos sufridos por el sector, indicó que «El servicio ‘Cherry Express’ ha sido un ejemplo de cómo podemos operar los actores de este negocio. Nos juntamos con nuestros operadores logísticos, con las navieras y dijimos: necesitamos ampliar nuestro servicio, nuestro mercado, llegar antes del Año Nuevo Chino con un producto más fresco. Nosotros nos sentamos a la mesa, preguntamos cuánto vale esto, paguemos más, recibamos un buen servicio y todos ganamos«, graficó.

Sin embargo, mostró su desconcierto ante las actuales tarifas marítimas: «Los fletes navieros a nosotros nos han subido entre un 100 y un 200%». Destacó que, incluso, en algunas rutas han tenido múltiplos no de un 100%, sino de 800% y 900%. «Estamos en un mundo donde a nivel de países productores, estamos super afligidos por los costos, además del tema servicio porque aquí estamos en una tormenta perfecta«, expresó.

Destacó además el contraste que se vive respecto de las exorbitantes utilidades obtenidas por las líneas navieras. Al respecto señaló: «Respetando mucho el libre mercado y la iniciativa privada, pero creo que aquí creo que se nos pasó la mano al otro extremo (..) aquí hay una situación absolutamente desproporcionada en términos de lo que estamos pagando» y añadió que en el sector «falta regulación»

Por su parte, Alberto Dale, CEO de UCC Chile, admitió que la industria frutícola trató de anticiparse, pero lo que pasó «es que no medimos el impacto que esto iba a tener la operación de los puertos que creo que hoy debería ser nuestro foco principal«.

Mencionó que «tuvimos casos de buques que debieron ir a San Vicente a cargar y ahí estuvieron 13 días cargando«. Describió esta situación como «inaceptable«, considerando las condiciones de la industria frutícola actual y el hecho de que a pesar de haber exportado siempre desde el puerto de Valparaíso, se hayan tenido que realizar embarques en Coquimbo o Caldera. Calificó todo lo ocurrido como «un despropósito«, ya que, en algún momento, vieron «carga del sur yendo hacia el norte de y carga del norte yendo hacia el sur«.

Antes esto, al igual que García Huidobro, hizo un llamado a los actores de la cadena a reunirse para remediar estas dificultades.

Vista desde el puerto

Oliver Weinreich, gerente general de TPS Valparaíso, en su intervención en el panel manifestó que «todos sufrimos con la cadena logística» y si bien señaló que existe la capacidad portuaria suficientes, reconoció que existen muchos desafíos en el largo plazo. Citó como ejemplo el aumento del tamaño de los buques y la necesidad ante ello de movilizar más carga en un periodo de tiempo menor lo que «estresa la cadena logística«.

En cuanto a la infraestructura portuaria indicó que «hay que moverse rápido. Las tres terminales de la zona central todavía tienen espacio para crecer y hay que ser creativo para generar capacidad (…) y en el intertanto ver cómo coordinamos para seguir mejorando o haciendo eficiente la capacidad existente hoy día«.

Sin embrago, fue optimista en cuanto a la mejora de la productividad del terminal que según indicó, está mejorando. «Vamos subiendo, está mejorando, digamos que ahora estamos en un 60 y un 70%, pero la temporada que viene tenemos que estar a 120%», proyectó. Aunque reconoció que «hay que analizar muchos procesos, aplicar las experiencias aprendidas y los avances logrados (como la digitalización de los procesos) durante la próxima temporada, pero para eso hay que reunirse y estar conversando«.

La mirada naviera

El punto de vista naviero corrió por cuenta de Christian Seydewitz, Vicepresidente Senior para Chile de Hapag-Lloyd, manifestó que «hemos tenido un compromiso con los exportadores desde que nació el ‘Cherry Express’ que después se extendió al concepto de ‘Asian Express’ para el resto de la fruta. Ese compromiso está. Creo que lo que sucedió y que nos tiene hasta el día de hoy complicados fue el shock de demanda, donde las importaciones de bines crecieron un 40% en EE.UU. y en el caso de Chile entre un 15 y un 17%, respecto de un año normal«, además, explicó, lo anterior se cruzó con un shock de oferta, lo complicó aún más la situación.

Antes esto señaló que «tenemos que buscar soluciones creativas ara ve cómo salir delante de esta situación«.

Fuente: Mundo Marítimo